lunes, 8 de febrero de 2010

China, nº 1 en la compra de diamantes


Llueven las noticias sobre la velocidad en que la riqueza se ha incrementado en China. Al anunciado mayor mercado mundial de artículos de lujo le gustan los diamantes.

Ha disminuído la demanda de la tradicional joya de jade y oro en favor del diamante: en el año 2009, se vendieron diamantes por valor de 1,5 billones de dólares (1,1 billones de euros). En 2010 se espera incluso un incremento de las ventas. El récord de los récords en China.

Las razones son tres principalmente. Como la firma De Beers pretende vender diamantes para siempre, su intenso y largo esfuerzo en Asia por inculcar la cultura del diamante ha dado sus frutos: los chinos quieren diamantes.

El diamante se ha reconvertido en objeto de deseo: siempre lo ha sido pero los tiempos económicos del país acompañan. Los chinos son cada vez más ricos y a una velocidad galopante, y la mujer cada vez es más independiente y acaba comprándose uno como premio personal en vez de esperar un anillo de compromiso.

Ese aura sumamente especial y soñadora de la sortija de compromiso ha dejado huella entre los chinos, y De Beers y otras compañías del mundo del diamante están más felices que unas pascuas. Existen muchos chinos jóvenes casaderos.

A todo esto hay que añadir que San Valentín 2010 coincide con las fiestas del Año Nuevo chino, tradicionalmente la época perfecta para casarse. Todo apunta a que el mercado de diamantes está verdaderamente orientado a satisfacer la demanda china.

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